viernes, 26 de diciembre de 2014

Indecisión

Hace un tiempo que hablando con un chico al que conocí por casualidad (sin intenciones "a priori") llegó el tema de ropa de invierno. Así, como quien quiere la cosa, me acabó proponiendo ir a una localidad cercana a comprar ropa junto con un amigo suyo. Este pueblo es conocido por su industria del calzado.

El plan que suelen hacer en estos casos es ir a comprar cosas y después acercarse a unas pozas termales que hay a 5 km. a darse un baño. Esas pozas abiertas al público están muy bien, de hecho las suelo visitar con un par de amigos con frecuencia, sobre todo en invierno. Me llamó un poco la atención que, al decirle con quién solía ir, me soltó un comentario del estilo "Mira qué pillín" (se me olvidó mencionar el hecho de que son amigos sin derecho a roce).

El caso es que, al llegar a casa ese día, mi cabeza despertó y empezó a maquinar malamente. Luego descubrí que en dichas pozas, una vez se queda todo a oscuras, el agua calentita empieza a hacer de las suyas, los cuerpos se arrejuntan y... Bueno, mejor me callo que ya he dejado clara la idea, ¿no?

La idea siguiente fue: ¿qué narices harán ellos allí? Partiendo del hecho de que yo quedaba "fuera de juego", me daba miedo de verme en una encerrona y, de alguna manera, encontrarme muy incómodo y cortarles el rollo a ellos, así que días después le mandé un Whatsapp diciendo que iría a comprar ropa pero a las pozas no. Desde entonces, no volví a tener noticias del evento hasta el pasado septiembre.

Ya que necesitaba el pantalón, volví a recordarle en hecho de ir a comprarlo y a las pozas. Pero había otro motivo: el hecho de que ellos podrían hacer lo que quisieran, que yo me iba a recrear en el agua calentita y olvidarme del resto del mundo, como suelo hacer cada vez que voy. En ese momento, me dijo que no me había vuelto a decir nada porque yo no quería ir a las pozas. Para más inri, cuando le dije que solía ir con amigos "sin derecho a roce" me soltó indirectas del estilo: "Pues qué aburrido, ¿no?".

Dijo que ya me comentaría para ir pero no ha vuelto a mencionar el tema. Me temo, y a riesgo de parecer pretencioso, que quería algo conmigo pero mis indecisiones y mi mala cabeza me hicieron perder una oportunidad y quedarme pensando desde entonces en lo que pudo ser y no fue.

Pseudoalucinación parasitaria de hoy: Mi alma perdida - Amaral.

10 comentarios:

  1. Pues no sé si el tipo este querría algo o no contigo y mi comentario va a ser muy categórico teniendo en cuenta que no conozco a ese hombre de nada, pero visto su modo de actuar me parece el típico melón que se mueve en este tipo de historias, que si entras por su onda "muy bien" y si no eres un "aburrido". Es verdad que quedarse con la sensación de haber estado a punto de vivir algo que al final no ha llegado a ocurrir crea ese sentimiento que describes tú al final pero hombre....tampoco te conozco mucho a ti pero en lo poco que voy adivinando pienso que te mereces gente con un poco más de fundamento, ¿no? .)
    Que bonita la canción de Amaral, ayyyy...
    Pasa muy buen fin.de, ¿vale?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Igual sí que es un poco arriesgado juzgar a alguien sólo por esto, pero sin embargo no me llevo a engaño pensando que va a ser el gran amor de mi vida ;-)

      Lo que quería reflejar en esta entrada es que mis comeduras de cabeza me hicieron quedarme en casa con mis quejas y lamentos y es lo último que debería hacer.

      Un saludo.

      Eliminar
  2. Neno, así, tal y como lo cuentas, lo que pudo ser y no fue, no es más que un polvete. Vamos, que no tiene pinta de que la historia fuese muy sólida, ni visos de convertirse en nada (aunque sorpresas te da la vida). Básicamente porque el otro tenía muy claro lo que quería (su plan), me da a mí... Que te mola ese plan, pues bien y a pasarlo mejor. Que no, pues bien también. Darle vueltas, ¡no!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Está claro que si su plan no coincide con mi plan la cosa no va a ir mucho más lejos como no ha ido. Es más el hecho de que he tenido la oportunidad de salir de mi agujero y hacer cosas diferentes y lo he desaprovechado.

      No tengo la sensación de que haya perdido gran cosa, pero no puedo dejar que mis comeduras de cabeza me gobiernen siempre porque si es así no voy a ir a ningún lado nunca.

      Un saludo.

      Eliminar
  3. Suena como que quería algo contigo, pero nada mas alla de pasarlo bien un rato. Creo que si tu estas mas interesado en la ropa te conviene ir tu solo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La ropa ya está comprada, ese no era el problema. Como he comentado antes, es vencer mis comeduras de cabeza y el miedo.

      Un saludo.

      Eliminar
  4. Si el cuerpo te pedía irte con ellos a las pozas seguro que te lo hubieras pasado bien pero si no era lo que querías no te preocupes, hay gente ahí fuera con la que seguro que congenias más. :)

    Feliz año.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, no es el hecho de ir o no a las pozas o a comprar ropa. Me preocupa más la actitud que tomo hacia las cosas.

      Un saludo.

      Eliminar
  5. Que la actitud no te preocupe. ¿Que no te gusta ir a frotarte contra otro a unas pozas? Pues no pasa nada. ¿Que el otro no te llama porque sólo quiere un poco de refrote? Pues tampoco pasa nada. Si a ti no te interesa ese plan, pues a otra cosa mariposa.

    Y si realmente quieres ir, pues adelante. Por lo menos pruébalo, y si luego ves que no, con no volver lo tienes solucionado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De eso se trata, de ir probando. El mayor problema es cuando entran otras personas en juego.

      En fin, no queda otra.

      Eliminar